[Extracto de capítulo 83:]
Miró Romo a Eu y luego a mí, otra vez a Eu y luego hacia sí, miró hacia arriba y comprendió. Se carcajeó. Madre mía, pues sí que era sencillo de contar. Me puse colorado —yo que nunca me pongo colorado—y le di al play. Monkey business.